La producción de alimentos en Corralillo es tarea de todos en acción cooperativa.

La producción de alimentos y el mejoramiento de la calidad de vida de los pobladores, son las principales inspiraciones de Eduardo Javier Díaz Mendoza, Técnico Medio en Informática e Ingeniero Industrial y Presidente de la CPA 21 de Septiembre de Corralillo. Tareas estas que lo impulsan a ejecutar acciones concretas en su aporte al desarrollo local. En estrecho vínculo con el Proyecto IRES (implementado por FAO y el Ministerio de la Agricultura en Cuba y financiado por el Fondo Verde del Clima), muestra logros y avances en pos de la agricultura y la ganadería territorial.

Corralillo es uno de los siete municipios seleccionados por IRES para su intervención, justamente por ser de los más vulnerables a los efectos ante el Cambio Climático. Pero cuenta con recursos humanos de alto calibre, que no temen a los desafíos ni a las adversidades, capaces de aprovechar al máximo cada oportunidad que la vida ofrece. Agradece así Eduardo, la posibilidad de formar parte de este proyecto en el territorio corralillense:

“A partir del vínculo con IRES, la CPA se ha abierto al empleo de técnicas que ya existían pero que no las aplicábamos por desconocimiento. Podemos citar los proyectos de suelos, la implementación de cercas vivas, con sus financiamientos respectivamente. Nuestros asociados sabían que existían las técnicas, pero no las conocían a profundidad. Con las capacitaciones ofrecidas por IRES, que facilitan la obtención de conocimientos, se ha podido poner en práctica la ciencia y la técnica en las fincas de las áreas de intervención. Con la propia implementación de los diferentes módulos generalizándolo en el resto de las áreas de la cooperativa. Los asociados cooperativistas pueden acceder a mayores ganancias por los productos cultivados, lo que ha elevado nuestro nivel de vida.”

Insiste el joven cooperativista en los logros alcanzados con la vinculación al proyecto IRES:

“Desde el punto de vista del desarrollo social de nuestra cooperativa, también es meritorio resaltar la ejecución de los Comités de Género que se realizan en la Escuela de Campo, encavada en nuestra Cooperativa, pues la desigualdad de género conlleva a la inseguridad alimentaria y a la malnutrición. Antes de IRES muchos de nuestros campesinos conservaban arraigos un tanto retrógrados. Se ha avanzado mucho con el debate y reflexión de estos temas. En nuestra agricultura actual, se tiene igualdad de derechos y cumplimiento de deberes en ambos sexos. La contribución de la mujer a la producción agrícola es fundamental.”

Es Eduardo, un joven de estos tiempos con mucha confianza en sus trabajadores y en sí mismo. Confía también en las bondades que ofrece IRES como proyecto y las aprovecha al máximo en aras del bienestar de sus asociados y del territorio en general. Entiende que trabajando juntos se logran avances significativos, que con posterioridad se pueden generalizar a otros municipios cercanos que no están insertados al proyecto.

El líder cooperativista abre paso a las nuevas generaciones en temas ambientales y de soberanía alimentaria. Se desarrollan en la CPA múltiples actividades con estudiantes de la Secundaria Básica del territorio, como parte de la formación y orientación vocacional hacia carreras agropecuarias. Tal es el caso de la relación sistemática con los pioneros del proyecto Pulgar Arriba, y otros círculos de interés, a los que enseña y permite poner en práctica los conocimientos teóricos. Garantizando la formación del hombre nuevo.

Considera nuestro joven campesino que la producción de alimentos y el mejoramiento de la calidad de vida de los pobladores en Corralillo, no es solo prioridad para él y los asociados a la CPA “21 de Septiembre”, sino que se evidencia la participación intersectorial. En nuestro municipio, existe la integración y apoyo de todos los principales decisores municipales: La Delegación de la Agricultura, la ANAP, la ACTAF, el Gobierno, el PCC, la Empresa Agroindustrial, el CUM, el CITMA. Es tarea de todos en acción cooperativa.