Camino hacia la igualdad en tiempos de cambio climático

Soberanía alimentaria con enfoque de genero

En un contexto de enfrentamiento al cambio climático, resulta vital la seguridad y soberanía alimentaria desde un enfoque de sostenibilidad y justicia social, partiendo del reconocimiento de que mujeres y hombres experimentan de modo diferente los efectos del cambio climático, los desastres y de las crisis en general.

Las desigualdades y brechas de género:

Colocan a mujeres y niñas en mayor situación de vulnerabilidad, frenando el desarrollo de su potencial. Por ello, urge la adopción de políticas y la implementación de acciones que apuesten por el desarrollo sostenible.

¿Como lograrlo?

Impulsar la transformación hacia sistemas alimentarios más eficientes, inclusivos, resilientes y sostenibles para obtener una mejor producción, nutrición y bienestar común.

Asegurar la participación de hombres y mujeres que desarrollan su capacidad de resiliencia y la de sus comunidades para alcanzar los objetivos de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas y del Plan de Desarrollo del país. 

Promover una mirada integradora para fortalecer una visión de corresponsabilidad social de las familias, el Estado, las autoridades locales y todos los actores económicos.

Mujeres a pie de surco

Si bien desde el proyecto social cubano se promueve la igualdad de género, materializada en avances y logros significativos, todavía persisten estereotipos propios de la cultura patriarcal.

En los ámbitos rural y agropecuario, las mujeres se encuentran en mayor desventaja debido a:

  • Menor acceso a recursos productivos, empleos remunerados e ingresos.
  • Deficientes condiciones de trabajo debido a falta de recursos, lejanía y transporte.
  • Bajo nivel educacional y conocimiento técnico y ausencia de liderazgo en las labores agropecuarias.
  • Sub-representación en los espacios de toma de decisiones.
  • Deterioro de servicios de apoyo al hogar y la familia, reforzado por la COVID-19.
  • Mayor presencia de estereotipos en la distribución de oficios, responsabilidades y tareas al interior de las familias.
  • Manifestaciones de violencia contra las mujeres.
  • Menor reconocimiento de su trabajo y aportes.
  • Limitada preparación integral en temas de género y las relaciones con resiliencia, cambio climático y vulnerabilidad.

Ellas frente al cambio climatico

El cambio climático es una de las principales amenazas para la justicia alimentaria, los modos tradicionales de subsistencia y la vida de las personas. Sus impactos son cada vez más preocupantes; en particular, aquellos que afectan al sector agropecuario y forestal, dada su alta dependencia de las condiciones climáticas. Según la Organización de Naciones Unidad, entre los grupos más afectados se encuentran las mujeres, pues son las principales recolectoras y administradoras tanto de agua como de combustible para el trabajo doméstico que garantiza la sostenibilidad de la vida.

¿Por que es necesaria la mirada de genero?

– En situaciones de crisis se potencian las tradicionales barreras y las desigualdades que enfrentan las mujeres en el acceso a recursos productivos (crédito, tierra, agua, capacitación, tecnologías), el uso del tiempo y la participación en procesos de toma de decisiones.

– Ellas son las principales responsables (por asignaciones culturales) de la alimentación y el cuidado familiar, por lo que la escasez de recursos puede impactar negativamente sobre su salud física y mental.

– Las mujeres tienen mucho que aportar como guardianas de la biodiversidad y del ambiente, por sus conocimientos para la seguridad alimentaria, la sostenibilidad de la vida y la búsqueda de soluciones sustentables.

– Existe una relación positiva entre el empoderamiento de las mujeres y el logro de la seguridad alimentaria, la nutrición y la reducción de la vulnerabilidad.

– Las acciones de respuesta deben generar las condiciones necesarias para que las mujeres no queden excluidas ante escenarios complejos.

¿Por que apostar por IRES?

1. Nuestro proyecto “Incremento de la resiliencia climática de hogares y comunidades rurales a través de la rehabilitación de paisajes productivos en localidades seleccionadas de la República de Cuba (IRES)”, es el primero apoyado en Cuba por el Fondo Verde para el Clima y el cuarto formulado de conjunto con la FAO en América Latina y el Caribe.

2. Pretende incrementar la resiliencia climática de la producción agrícola y garantizar la seguridad alimentaria a través de servicios ecosistémicos mejorados y la gestión del paisaje; utilizando sistemas agroforestales, silvopastoriles, reforestación y regeneración natural asistida de bosques, en siete municipios vulnerables a los impactos del cambio climático.

3. IRES persigue, en su implementación, un liderazgo equitativo donde mujeres y hombres:

  • Trabajen en condiciones de igualdad y equidad en pos dela resiliencia de los sistemas productivos y comunidades rurales ante el cambio climático.
  • Accedan por igual al uso y control de los recursos y bienes, así como espacios de formación e intercambio y socialización de saberes para enfrentar el cambio climático.
  • Compartan roles y funciones en los espacios doméstico y laboral.
  • Promuevan una gestión y relaciones de género más justas.
  • Contribuyan a disminuir y eliminar estereotipos sexistas y discriminaciones por motivos de género.

Ellas, mas resilientes

El proyecto trabajará por la igualdad de derechos y oportunidades de mujeres y hombres para:

1. Fortalecer capacidades, principalmente a mujeres y jóvenes, parael acceso a nuevas fuentes de empleo, medios de producción, tecnologías productivas y acciones de capacitación para aumentar laresiliencia. Mejores condiciones de vida de alrededor de 51 713 personas, en particular, 23 788 mujeres. Mayores beneficios para las fincas atendidas por mujeres mediante la adquisición de sistemas de riego, bombas eléctricas, equipos para módulos silvopastoriles, cercas, biodigestores y otros. Realización de Escuelas de Campo en fincas atendidas por mujeres. Participación equitativa de hombres y mujeres en actividades de formación.

2. Transformar imaginarios sociales y conductas discriminatorias que reproducen estereotipos sexistas.

3. Diseñar e implementar un Plan de Acción de Género y tener una base de datos.

4. Contar con representantes de género en los equipos gestores a nivel local y nacional.

5. Disponer de un presupuesto que respalde las propuestas de las mujeres.

6. Propiciar alianzas nacionales e internacionales (redes) y espacios de articulación.

7. Identificar y empoderar a mujeres emprendedoras, así como desarrollar liderazgos transformadores incrementando sus capacidades, confianza y motivaciones.

8. Contar con Estrategia de Comunicación inclusiva y sensible a género que visibilizan aprendizajes y aportes de las mujeres.

9. Incorporar a la familia, como espacio fundamental en la formación y reproducción de conductas y valores, en las acciones del proyecto.

Zona Central:

Municipio: Los Arabos, Provincia Matanzas. 

Municipios: Corralillo,Quemado de Güines, Santo Domingo, Provincia Villa Clara.

Zona Oriental:

Municipios: Jobabo, Amancio, Colombia, Provincia Las Tunas.